La autoridad ministerial subrayó que todos los trabajadores portuarios operan bajo la legislación libanesa y cualquier violación será abordada legalmente, destacó el diario nacional Al-Akhbar.

Rasamni confirmó que la seguridad del puerto es monitoreada de cerca por el Ejército de Líbano, la inteligencia y las aduanas, y las violaciones no son tan significativas como se informó.

El titular de Obras Públicas reveló planes para mejorar la protección del puerto, incluidos sistemas de inspección avanzados y la creación de una unidad de seguridad dedicada.

De acuerdo con el diario, los comentarios de Rasamni siguieron a rumores sobre que Hizbulah utilizaba el puerto para el contrabando de armas, que también fueron negados por el director general de la instalación, Omar Itani.

En este mismo contexto, el diputado Hassan Fadlallah rechazó el contrabando de armas de Hizbulah a través del Puerto de Beirut y pidió al poder judicial tomar las medidas legales necesarias contra quienes difunden estas mentiras.

A su vez, condenó a quienes trabajan para socavar los fundamentos sobre los que se construye Líbano como país de diversidad y asociación, y no dudan en atacar la unidad de las instituciones del Estado.

En una declaración, Fadlallah enfatizó que los ciudadanos sufren las agresiones israelíes y exigen que el Estado cumpla con su verdadero papel.

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