Como es tradicional, la competición pactada a 42,195 kilómetros partió de la famosa avenida de los Campos Elíseos, con el Arco del Triunfo como testigo y un mar de personas en el público para presenciar la largada en una mañana primaveral y sin lluvia.

La meta espera en la avenida Foch, tras un recorrido que incluye a emblemáticos sitios parisinos, desde el río Sena y sus patrimoniales márgenes hasta la Ópera Garnier, los bosques de Vincennes y Boulogne, la plaza de la Bastilla y por supuesto, la Torre Eiffel.

Después de los franceses, que representan el 67 por ciento de los corredores registrados, los países con mayor cantidad de inscritos son Reino Unido (11,7 por ciento), Estados Unidos (3,6) y Alemania (2,4).

Sin embargo, los favoritos vuelven a ser los atletas africanos, en particular los kenyanos y los etíopes, que han conquistado entre ellos las últimas 16 ediciones en el masculino y 17 en el femenino.

Kenya acumula 25 títulos y Etiopía 18, nación que dominó el año pasado en ambos sexos.

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