Aunque los patrocinadores eliminaron el aumento del impuesto al valor agregado al pan y a la posesión de vehículos y prometieron revisar otros, el proyecto, ya aprobado por el Parlamento, está paralizado a la espera de su sanción por el presidente keniano, William Ruto.
El mandatario se ha mostrado conciliador; alabó el papel de las jóvenes generaciones en las protestas, convocadas a través de las redes sociales, y exhortó a entablar un diálogo para encontrar terreno de entendimiento entre las respectivas posturas.
Esa postura, sin embargo, fue insuficiente para enfriar los ánimos y, por el contrario, los patrocinadores de las marchas callejeras anuncian la posibilidad de una huelga general para hacer valer sus demandas.
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