La manzana de la discordia total se dio cuando en las últimas horas en una reunión en Tenerife, Islas Canarias, las Comunidades autónomas acordaron en la Conferencia Sectorial de Infancia acoger de forma voluntaria a 400 menores migrantes tutelados en Canarias y Ceuta.
Sin embargo, no hubo consenso sobre la propuesta del Gobierno, a instancias de Canarias, para hacer estos repartos obligatorios con la modificación en la Ley de Extranjería.
Pese a las discrepancias internas y críticas del Ejecutivo al conservador PP, su hasta ahora socio en cinco comunidades, Vox, dijo que la aceptación por las regiones que cogobierna con los populares del reparto voluntario de 400 menores supone dar por rotos los convenios entre ambos partidos.
La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, aseguró que el arreglo para un reparto voluntario de 400 menores es similar al de octubre de 2023, pero las dificultades burocráticas han impedido salir de Canarias más del 80 por ciento de ellos.
Por eso es necesaria una reforma legal vinculante para no dejar ningún niño ni niña atrás ni a ninguna comunidad atrás, sentenció Rego.
Días atrás, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, señaló que las regiones serán solidarias para acoger menores siempre que tengan capacidad, aunque al mismo tiempo lanzó críticas al Gobierno de Pedro Sánchez “de no tener política migratoria”.
En este contexto, Vox acusó al PP de romper los pactos de gobierno que comparten en cinco comunidades autónomas y adelantó que celebrará este jueves una convocatoria urgente y extraordinaria del Comité Ejecutivo Nacional para acordar «los próximos pasos».
La organización de extrema derecha señaló en un comunicado a Núñez Feijóo, de haber obligado a los presidentes regionales a votar sí al reparto de 400 menores.
«Tras entregar el CGPJ (Consejo General del Poder Judicial), RTVE, la Junta Electoral Central o aliarse en Europa contra los intereses de los españoles, el PP llega a un nuevo acuerdo con el PSOE (Partido Socialista Obrero Español) y confirma dónde y con quién quiere estar», deploró Vox.
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