A pesar de los intentos de algunos grupos terroristas y milicias separatistas de impedir que los ciudadanos ejerzan su derecho al voto, las elecciones se celebrarán en su fecha constitucional sin ningún cambio, declaró el jefe de la Alta Comisión Judicial Electoral, Jihad Murad.
Explicó que el proceso electoral se lleva a cabo completamente bajo supervisión judicial, desde la nominación de los candidatos hasta el anuncio de los resultados.
Murad aclaró que se equiparon ocho mil 151 centros de votación en todas las provincias y se tomaron en cuenta las grandes concentraciones residenciales y laborales.
Por otro lado, puntualizó que el número total de candidatos llegó a 8 mil 953, de los cuales siete mil 437 candidatos se retiraron, y mil 516 se mantienen en la carrera por ocupar los 250 escaños en la Asamblea del Pueblo.
En cuanto al equipamiento logístico, Murad confirmó que el Ministerio del Interior había asegurado todos los suministros para el proceso electoral de tinta secreta, sobres, actas de escrutinio y material de oficina.
En cuanto a la fecha y horario del proceso, el funcionario judicial dijo que la propaganda electoral debe cesar 24 horas antes de la jornada de votación que iniciará a partir de las 07:00, hora local, y termina a las 19:00 del mismo día.
El artículo 64 de la Ley Electoral autorizó al Comité Judicial Supremo para las Elecciones a prorrogar el período de los comicios por un máximo de cinco horas en todos o en algunos colegios, aseveró.
Fuentes consultadas por Prensa Latina, informaron que el Partido Baath Árabe Socialista, actualmente en el gobierno, entra con fuerza en los comicios mediante 169 candidatos que figuran en su lista de Unidad Nacional.
Dicho listado abarca también a 16 candidatos que representan los 14 partidos que forman la Coalición del Frente Nacional Progresista, liderada por Al-Baath.
Entre los candidatos figuran empresarios, industriales, periodistas, trabajadores, campesinos, figuras tribales y heridos de la guerra, y la mayoría promueve la construcción de una Siria nueva y fuerte como lema electoral.
En las anteriores elecciones celebradas en 2020, votó el 33 por ciento del padrón electoral, y los actuales comicios representan para los sirios un reto a vencer, en particular en lo relativo al logro de una aceptable participación popular y elegir a parlamentarios que estén a la altura de los numerosos desafíos que enfrenta el país.
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