Recientemente, medios de prensa divulgaron que miembros de LLA frecuentaron a Alfredo Astiz, Raúl Guglielminetti, Carlos Suárez (hijo), Antonio Pernías y Adolfo Donda, entre otros juzgados y encarcelados por secuestrar, torturar, asesinar y desaparecer personas, incluidos niños, durante ese régimen.
En un comunicado, agrupaciones como Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, Hijos, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y la Asociación Buena Memoria, expresaron su enérgico repudio a ese hecho y consideraron que se trata de un acontecimiento sin precedentes en más de 40 años de democracia.
No solo es una enorme provocación para familiares, sobrevivientes, organismos de derechos humanos y para quienes luchamos todos los días por defender el camino de Memoria, Verdad y Justicia, sino que representa una grave afrenta a la República toda, añade el texto.
Además, señala que los presos visitados en la cárcel de Ezeiza son probados genocidas responsables del secuestro, la tortura y la muerte de miles de argentinos.
No podemos permitir que se naturalice que legisladores electos democráticamente desprecien de este modo la democracia y las políticas de Memoria, Verdad y Justicia, conseguidas con la lucha de la inmensa mayoría de nuestro pueblo, asevera el documento.
Convocamos a todos los cuerpos legislativos, a los partidos políticos, a las organizaciones sociales y a la ciudadanía en general, a que se sumen a expresar su repudio, concluye.
Por su parte, el Partido Justicialista manifestó su preocupación por lo sucedido y por la decisión del gobierno de entorpecer la búsqueda de los niños apropiadas durante la dictadura al quitarle apoyo a la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad.
La condena a esos hechos fue respaldada por los diputados de Unión por la Patria, quienes ratificaron su compromiso con el respeto a la democracia.
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