Jadue, dirigente comunista y de origen palestino, cumplió 45 días en prisión preventiva, lo cual produjo la vacancia del puesto y llevó a las autoridades de esa municipalidad a fijar para el 26 de julio la elección de un nuevo jefe edil que termine el período.
“Lamentamos que una medida cautelar desproporcionada le quite la calidad de alcalde a quien fue electo por amplia mayoría, afectando la voluntad popular y los procesos democráticos que actualmente rigen en nuestra patria”, señaló la Municipalidad en un comunicado.
Jadue llevaba tres períodos al frente de esa comuna y durante su Gobierno implementó varios programas de beneficio social, como la Farmacia, la Óptica y la Librería Popular, el Centro de Rehabilitación, la Red de Bibliotecas y la Universidad Abierta de Recoleta.
El pasado 3 de junio un tribunal le impuso la máxima medida cautelar por supuestos delitos de corrupción en las negociaciones de la Asociación Chilena de Municipalidades con Farmacias Populares.
Además, le congelaron sus bienes, pese a que tiene abiertas todas sus cuentas y no hay indicios de algún beneficio personal.
El abogado Juan Carlos Manríquez, uno de sus defensores, consideró como una arbitrariedad que la justicia decida separar de su puesto a alguien que no ha sido condenado y fue electo por voto popular.
“Un sistema de justicia que funciona a medias, con evidentes signos de degradación, ha decidido que un alcalde elegido democráticamente cese en su cargo”, denunció, por su parte, en redes sociales la diputada Carmen Hertz.
Presidentes y organizaciones latinoamericanas, así como representantes del mundo de la política, la música, la literatura, los derechos humanos, los sindicatos y la sociedad civil demandaron la liberación de Jadue ante lo que calificaron como una persecución jurídica en su contra.
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