“Agradecemos también la inmediata respuesta solidaria del Gobierno de Nicaragua ante el fallido intento de golpe de Estado del 26 de junio último en nuestro país”, afirmó la titular durante un discurso en una recepción en la sede de la misión diplomática de la nación centroamericana.
En presencia de autoridades gubernamentales y electas nacionales, exministros, los embajadores de Rusia, China, Venezuela, Colombia, la República Árabe Saharaui Democrática, la encargada de negocios de Cuba y otros representantes diplomáticos, Prada sostuvo que la Revolución Sandinista constituye un ejemplo de lucha por la justicia social y un mundo mejor.
Reiteró el rechazo de Bolivia al bloqueo económico, comercial y financiero de Estados contra Nicaragua, Venezuela y Cuba y a la campaña de calumnias de Washigton contra esos países.
Al intervenir, el embajador de Nicaragua en Bolivia, Elías Cheves, resaltó que el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) con el comandante Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo a la cabeza, conducen a su país hacia cambios cada vez más profundos en la ruta del desarrollo.
Indicó que fieles al pensamiento antimperialista de Augusto César Sandino y del fundador del FSLN, Carlos Fonseca Amador, el Gobierno y el pueblo nicaragüenses obtienen resultados que son reafirmados por las cifras.
Informó que un estudio de opinión de M&R Consultores confirmó que el 82,4 por ciento de los nicaragüenses aprueba la gestión gubernamental y el 91,8 de la población opina que el Gobierno Revolucionario de Unidad Nacional garantiza esperanza.
Cheves subrayó que, de acuerdo con ese estudio, el 83,2 por ciento considera que el Gobierno del FSLN conduce a la nación por la dirección correcta y 80,1 puntos porcentuales opinan que el presidente Ortega busca la unidad y la reconciliación entre sus compatriotas.
En una escala del uno al 10 sobre la garantía a la población respecto a servicios de transporte interurbano, mantenimiento de carreteras, alumbrado público y energía eléctrica domiciliar, el indicador fue de 8,73 por ciento.
La satisfacción se situó entre el 8,73 y el 8,87 por ciento en servicios de salud pública, agua potable, educación, seguridad y oportunidades de trabajo.
“La predisposición política hacia el FSLN es de 85,2 por ciento -informó el embajador-, el indicador respecto a la generación de esperanza de 84,9 puntos porcentuales, el de tranquilidad de 85,2 por ciento y de 84,5 unidades de 100 en relación con la seguridad.
Esta encuesta se realizó con la técnica de cara a cara a un universo de cuatro millones 705 mil 192 personas, se informó.
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