La Cancillería condena enérgicamente los planes e intentos de sustituir la voluntad del pueblo venezolano, expresada democráticamente en las urnas el pasado domingo 28 de julio, según refiere el documento.
Denuncia el escrito que en Venezuela se dan hechos de violencia luego de conocerse los resultados electorales que dan ganador a Maduro.
“Bolivia, como Estado que promueve la cultura del dialogo y la paz, rechaza los actos de violencia que están siendo promovidos para alterar el orden constitucional”, añade.
La Cancillería reitera que la “autodeterminación de los pueblos y la no injerencia son principios fundamentales del derecho internacional, que deben ser respetados para la convivencia entre los Estados”.
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