De acuerdo con la experta, el canje de una veintena de prisioneros anunciada el jueves último puede que sea el mayor de su tipo desde la Guerra Fría.
En una entrevista concedida al portal de noticias de la ONU la relatora calificó de histórico el intercambio al tiempo que instó a continuar trabajando por la libertad de otros aún tras la rejas.
Tras el anuncio, el portavoz del secretario general de la ONU (António Guterres), Stéphane Dujarric, consideró la noticia como un buen paso.
“Nos alegramos de que se haya podido llegar a un acuerdo entre las distintas partes y de que se haya podido llevar a cabo este intercambio”, dijo el jueves a la prensa.
Por su parte, el Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB) confirmó la víspera que ocho ciudadanos de la nación euroasiática llegaron al país como parte del acuerdo.
Anna y Artiom Dúltsev, Vadim Krásikov, Pável Rubtsov, Vadim Konoshchenok, Mijaíl Mikushin, Román Selezniov y Vladislav Kliushin, entre otros, fueron recibidos por el mandatario Vladimir Putin tras su arribo.
De acuerdo con el FSB, los ciudadanos rusos fueron intercambiados por “un grupo de personas que actuaban en interés de estados extranjeros en detrimento de la seguridad de la Federación de Rusia”.
Moscú está completamente satisfecho con el intercambio y agradece a los socios extranjeros su colaboración, añadió el Servicio Federal en un comunicado.
Entre los norteamericanos liberados se encuentra el estadounidense Evan Gershkovich, periodista del Wall Street Journal; Alsu Kurmasheva, periodista de Radio Liberty de ciudadanía norteamericana; y Vladimir Kara-Murza, periodista ruso-británico ganador del Premio Pulitzer.
Los relatores especiales de derechos humanos de la ONU son designados por el Consejo de Derechos Humanos del organismo con sede en Ginebra Suiza.
Esos tienen el mandato de supervisar e informar sobre situaciones de países específicos o cuestiones temáticas y trabajan de manera voluntaria e independiente de cualquier gobierno u organización.
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