Presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) boliviano, Marco Ernesto Jaimes, confirmó este viernes que recibió vía Ministerio de Relaciones Exteriores un requerimiento de detención preventiva con fines de extradición del exjefe antidroga boliviano hacia Estados Unidos.
Entrevistado por el programa televisivo Detrás de la Verdad, Jaimes afirmó que recibió la solicitud formal al TSJ procedente de la embajada de los Estados Unidos en La Paz, firmado por el director de Asuntos Jurídicos de la Cancillería, Antonio Mario Molina.
Tal requerimiento se refiere al exjefe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) del país andino amazónico Maximiliano Dávila (febrero de 2019-noviembre de 2019).
La solicitud es promovida por el “Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, en el marco del Caso N° S9 19 Cr.91 (DLC)”, de acuerdo con el texto oficial difundido durante la entrevista a Jaimes y al canciller en ejercicio, Iván Lima.
Expresa el escrito que el requerimiento se realiza “en los términos del Tratado de Extradición entre el Gobierno de la República de Bolivia (ahora Estado Plurinacional de Bolivia) y el Gobierno de los Estados Unidos de América”.
Añade que, en ese entendido, se solicita se tomen los recaudos correspondientes en atención a la solicitud de Detención Preventiva con fines de Extradición.
Dávila es investigado por el presunto envío de drogas desde Bolivia a Estados Unidos y tráfico de armas cuando trabajaba como jefe de la Felcn, y debe enfrentar un proceso penal en la Corte del Estado de Nueva York.
Se presume que Dávila colaboraba con una organización que refinaba en Bolivia cocaína producida en países vecinos y desde allí la exportaba a varios destinos, entre ellos el país del norte.
Jaimes explicó durante la entrevista en Detrás de la Verdad que el TSJ emprenderá todos los trámites para que el proceso de extradición se defina sobre la base del debido proceso en los próximos 30 días.
Por su parte, el canciller en funciones, Lima, informó que la solicitud de Estados Unidos está en marcha desde el 1 de febrero de 2022 y se reiteró en agosto del año en curso sin que se diera una respuesta por miramientos políticos.
Aclaró que ahora prevalece el enfoque jurídico ante una situación de narcotráfico, que se dirimirá sobre la base del debido proceso.
El ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, manifestó en enero de 2022 que un informe realizado por el departamento de Inteligencia de la Policía Boliviana develó los vínculos de Dávila con el narcotráfico, por lo cual fue detenido en territorio nacional por ganancias ilícitas.
Mencionó entre sus contactos a denominados “peces gordos” como Jorge Roca Suárez (alias Techo de Paja), aprehendido en Perú; y Omar Rojas, exmayor de la Policía, detenido en Colombia, ambos por narcotráfico.
El informe detalló que, en 2020, Techo de Paja, Omar Rojas e Ignacio Angus se reunieron con Dávila para coordinar la venta de un cargamento al comprador dominicano identificado como D.R.C.
La tramitación oficial de la extradición de Dávila sorprendió a la opinión pública boliviana, pues a pesar de la cero tolerancia del Gobierno del presidente Luis Arce al narcotráfico con cifras récord de decomisos y quemas, hasta el momento no se conocía ningún tipo de colaboración con la Agencia Antinarcóticos (DEA) de los Estados Unidos.
El 3 de noviembre de 2008, el gobierno del expresidente Evo Morales anunció la expulsión de la DEA del territorio nacional debido a su actividad de espionaje político y al financiamiento de grupos delictivos.
La decisión soberana se tomó porque en ese año la agencia norteamericana financió las tomas de aeropuertos promovidas por operadores políticos de la oposición bajo la denominación de “cívicos” en los departamentos de Santa Cruz, Pando, Beni y Tarija, cuando promovían un frustrado golpe de Estado, según se informó.
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