Por Alejandro Esteban, enviado especial

Alfred, monarca del orbe en pista cubierta, resultó la más veloz sobre la vistosa pista de tartán morado del Stade de France, al detener el cronómetro en 10.72 segundos, récord nacional, y de paso regalarle a Santa Lucía la primera medalla olímpica en su historia.

La caribeña salió disparada de los bloques y traspasados los primeros 50 metros exhibía clara ventaja sobre sus rivales, la cual mantuvo para triunfar de forma inobjetable sobre la superfavorita, la estadounidense Sha’carri Richardson, vigente monarca del orbe, quien registró 10.87, en tanto el bronce fue al pecho de la también norteña Melissa Jefferson (10.92).

Por su parte, Lafond volvió a crecerse en otro momento cumbre de la temporada, al imponerse con 15,02 metros, nuevo primado nacional, pues superó por un centímetro la plusmarca anterior, con la cual se coronó monarca del orbe bajo techo en Glasgow, en marzo pasado.

Al igual que Alfred, Lafond le dio a su pequeña isla de Dominica el primer metal olímpico de cualquier color en su historia deportiva.

A la dominiquesa la escoltó otra caribeña, la jamaicana Shanieka Rickkets, quien clavó los pinchos en 14,87 metros, para una valiosa plata para su delegación, que también sumó un bronce en la impulsión de bala para hombres, gracias a Rajindra Campbell (22,15 metros).

El último metal para la región caribeña, también bronce, lo obtuvo el granadino Lindon Victor en la agotadora prueba del decatlón, tras acumular 8 711 puntos, superado solo por el noruego Markus Rooth —hizo la competencia de su vida con 9 796 puntos— y el alemán Leo Neugebauer (8 748).

Dos estrellas quedaron sorpresivamente fuera de podios, la jamaicana Shelly-Ann Fraser-Pryce, multicampeona olímpica y mundial, quien no se presentó a los puestos de arrancada en su heat semifinal, y el canadiense Damian Warner, monarca en Tokio 2020, en su caso tras irse en blanco en el salto con pértiga.

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