El funcionario calificó esa condición como “bastante difícil”, según lo definió en declaraciones a RTVC Noticias.
Patiño refirió que esa agrupación armada ya fue eliminada de la categoría de Grupo Armado Organizado (GAO) y que es considerada como un actor político, pues existe una resolución presidencial en la que se reconoce de manera explícita en esa categoría al ELN y su calidad de organización armada rebelde.
Sin embargo, el sábado pasado, justo cuando se vencía el plazo del cese al fuego entre el Gobierno y el ELN, ese grupo insurgente impuso condiciones para la continuación de las conversaciones hoy detenidas.
Si al Gobierno le interesa continuar la tregua, y aprovechando que su Delegación de Diálogos manifestó que existe una resolución presidencial donde se reconoce de manera explícita el carácter político del ELN y su condición de organización armada rebelde, entonces que la haga efectiva con un decreto presidencial retirándola de la lista de los GAOs, pidió.
A continuación esa estructura afirmó que una vez que se tenga conocimiento de dicho decreto, la insurgencia dispondrá que su Delegación se reúna con su contraparte para evaluar el cese y decidir sobre su continuidad; y revisar “los incumplimientos del Gobierno” a los que la guerrilla atribuye el congelamiento del proceso de pláticas.
En sus declaraciones de esta jornada, Patiño reveló que el representante de las Naciones Unidas, junto con los delegados de la Iglesia Católica trabajan arduamente para descongelar las conversaciones con el ELN.
Añadió que la culminación del cese de hostilidades puede comprometer la participación de los integrantes de ambas delegaciones de la mesa de paz.
Aseveró asimismo que el cese al fuego está atado a las condiciones de tranquilidad y seguridad para que la mayor cantidad de colombianos puedan participar democráticamente en territorios afectados por la violencia.
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