Los querellantes acusan a la pareja de una eventual intimidación a los trabajadores que se declaren en huelga.
Durante una entrevista que comenzó anoche bastante pasada de hora entre Trump y Musk en la red social X, hablaron sobre el posible papel que desempeñaría el magnate tecnológico en una futura administración del republicano de ser electo el 5 de noviembre.
El UAW, que recientemente apoyó a la vicepresidenta Kamala Harris para la presidencia, presentó cargos separados contra Trump y Musk ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales.
Los cargos afirman que el exmandatario y el magnate de Tesla habían «interferido, restringido o coaccionado a los empleados» que estaban ejerciendo su derecho a organizarse contra la empresa, «sugiriendo que despediría a los empleados que participaran en actividades concertadas protegidas, incluida la huelga».
El presidente de la UAW, Shawn Fain, dice que “tanto Trump como Musk quieren que la gente de la clase trabajadora se siente y se calle, y se ríen de ello abiertamente. Es repugnante, ilegal y totalmente predecible por parte de estos dos payasos”.
Por su parte, “esta demanda frívola es un truco político descarado destinado a erosionar el apoyo abrumador del presidente Trump entre los trabajadores estadounidenses”, expresó el asesor principal de su campaña, Brian Hughes.
“El presidente Trump fortaleció nuestra economía y entregó resultados en nombre de los hombres y mujeres olvidados de Estados Unidos, y lo volverá a hacer cuando sea reelegido el 5 de noviembre”, añadió en un comunicado.
Pero es poco probable que Musk o Trump se enfrenten a sanciones importantes si se descubre que han violado las leyes laborales, y cualquier acción podría tardar mucho tiempo en resolverse.
rgh/dfm
