El distrito de Tingbjerg, a seis kilometros al noroeste del centro de Copenhague, donde se produjo la detención, fue revisado por la policía con la participación de una brigada especializada.
El 9 de agosto, el gobierno danés anunció que reforzaba los controles en la frontera con Suecia, especialmente en el puente de Eresund, que une a ambos países.
Se está vigilando a los pasajeros de los trenes que cruzan el puente, y también se ha incrementado la labor analítica con cámaras de reconocimiento en la frontera.
mem/amp