¡Viniendo desde atrás! Cuba le remontó el juego a República Checa y logró su pase de ronda en este certamen, que arrancó ayer y se extenderá hasta el próximo 25 de agosto.
El triunfo es un merecido premio al equipo antillano que no se achicó y sacó el extra para pasar por encima a un complicado inicio de partido, donde el campeón de Europa y África marcó la delantera con una primera y única carrera en todo el desafío.
Los peloteritos de Santa Clara (centro de Cuba) plantaron ante un duro pitcheo de su adversario en el terreno.
Pero la novena de Everaldo Machado tuvo una excelente labor moticular con el abridor Deivi (El Tati) Hernández y el relevo de Yan Espinosa, fundamental para poder dar vuelta al marcador.
En la parte alta del sexto, Cuba logró ampliar la diferencia al anotar dos de las cuatro carreras del desafío y a partir de ahí el marcador no se movió más. Los niños encontraron el apoyo de una fanaticada cubana que los animó en el Estadio de los Voluntarios.
El equipo de Santa Clara (centro de Cuba) logró su boleto a Williamsport tras coronarse campeones de la serie nacional el pasado 2 de marzo al vencer a Sancti Spíritus.
Esta es la segunda actuación de Cuba en tales lides. El pasado año Bayamo debutó en estas también con un sonado triunfo ante Australia, aunque no avanzaron a la final del torneo.
La actual edición del certamen cuenta con la participación de 20 equipos, cinco de ellos de América Latina y el Caribe en busca de un lugar en la final, junto a cinco clasificados de otras zonas geográficas.
Por los del patio deberán encontrar su finalista entre los 10 planteles que compiten y se eliminarán entre sí.
De acuerdo con las reglas de este tradicional evento deportivo, el sistema es de doble eliminación. Un colectivo puede perder un juego y mantenerse en la pelea, pero el que tenga dos desafíos malogrados consecutivos dice adiós y regresa a casa. En otro partido de la jornada Japón le propinó 11 carreras a Puerto Rico
La Serie Mundial de Pequeñas Ligas (Little League World Series), fundada en 1947, es un torneo anual de béisbol para niños de 10 a 12 años, que se celebra en el este de Estados Unidos.
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