El jefe del Comité de Resistencia al Muro y a los Asentamientos, Muayyad Shaaban, estimó en un comunicado que el objetivo es aterrorizar y destruir las propiedades palestinas en el territorio con el fin de provocar un desplazamiento forzado de la población.
Explicó que desde el estallido del nuevo ciclo de violencia, el 7 de octubre de 2023, se produjeron 120 incendios en la gobernación de Nablus, 42 en la de Ramala y 26 en la de Jenin.
Del total, 77 afectaron tierras y campos de cultivos, mientras que 196 quemaron propiedades tanto públicas o privadas, incluidas apartamentos, edificios y vehículos.
Las autoridades israelíes patrocinan esas acciones como un método de intimidación y para causar daños económicos, afirmó Shaaban.
Días atrás, la Comisión alertó que el pasado mes las fuerzas de seguridad y los colonos israelíes ejecutaron mil 110 ataques en Cisjordania.
Recientemente, Shaaban reveló que en el primer semestre de 2024 las tropas y los habitantes de los asentamientos cometieron siete mil 681 violaciones en la Ribera Occidental.
Desde principios de enero hasta finales de junio, las autoridades de ese país aprobaron 39 planes de expansión de asentamientos en la Ribera Occidental y 44 en la zona ocupada de Jerusalén Este, alertó.
En total, prevén construir más de ocho mil 500 viviendas en el primer territorio y seis mil 723 en el segundo, subrayó.
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