Durante una comparecencia en vivo, el líder político y militar del movimiento libanés destacó el logro de la acción contra la base de inteligencia militar Aman y la Unidad 8200 en Glilot.
El jefe máximo de Hizbulah indicó que hablar de la intención de la Resistencia de atacar civiles y de que la ocupación israelí frustró esto, son alegaciones falsas y refleja el nivel de debilidad de esta entidad.
Según reveló, «no teníamos intención de utilizar misiles estratégicos actualmente, pero es posible que sean empleados en un futuro próximo».
Nasrallah apuntó que ninguno de los misiles estratégicos de los «que habla el enemigo resultó dañado» y su bombardeo apuntó a valles vacíos o evacuados de este tipo de armas.
A propósito, la autoridad de la Resistencia señaló que la alegación del ejército israelí, adoptada por el primer ministro Benjamín Netanyahu, de que destruyó miles de misiles y de lanzadores es totalmente falsa.
Todas las plataformas que participaron en el disparo de los misiles no fueron alcanzadas antes de la operación, y sólo dos fueron dañadas después, aclaró.
En este punto, aseguró que Israel no poseía ninguna información de inteligencia, y sus incursiones que precedieron a la acción de respuesta una hora, se debió al movimiento natural de los combatientes.
Al respecto, el líder de Hizbulah subrayó: «todas las redadas lanzadas por el enemigo no alcanzaron la zona de la operación».
En la ocasión, puntualizó que la agresión israelí no fue una acción preventiva y la Resistencia tomó la decisión de responder a pesar de toda la intimidación que algunos dentro de Líbano ayudaron a difundir.
Seguiremos igualmente guardando el silencio del enemigo israelí sobre los resultados de lo sucedido en estas dos bases, especialmente en Glilot, a 110 kilómetros de la frontera libanesa y a mil 500 metros de Tel Aviv, añadió.
Al mismo tiempo, manifestó que la operación de este domingo puede ser muy útil para las partes palestina y árabe en las negociaciones para alcanzar un alto al fuego en Gaza, y su mensaje es claro al enemigo y los estadounidenses.
«Cualquier esperanza de detener los frentes de apoyo es una ilusión, y lo que empezamos desde hace 11 meses lo completaremos, sin importar la intimidación y los sacrificios», sentenció.
Al amanacer, la Resistencia confirmó la ejecución de una operación aérea con numerosos drones hacia la base Glilot, afiliada a la División de Inteligencia Militar Aman y a la Unidad 8200, perteneciente al ejército de Israel.
Como parte de la represalia por la agresión israelí al suburbio sur de Beirut, Hizbulah decidió también atacar 11 sitios y cuarteles en Galilea y el Golán sirio ocupado con misiles Katyusha, cuyo número superó los 300. car/yma