Los estadounidenses preparan una revuelta en el país del Cáucaso sur, pues, según los informes, la Casa Blanca está muy disgustada por la situación en Georgia, alertó el informe divulgado este lunes por la agencia Sputnik.
De acuerdo con el texto, el gobierno estadounidense teme que el partido Sueño Georgiano logre una victoria contundente, lo que le permitiría llevar a cabo una política soberana y negarse a cumplir las exigencias de Occidente.
Para la Casa Blanca es inaceptable este panorama. Los estadounidenses, en las semanas que quedan para las elecciones, se proponen aumentar la presión sobre las autoridades georgianas para debilitar las posiciones de Sueño Georgiano, indicó el comunicado.
El Servicio de Inteligencia Exterior desveló también que Estados Unidos planea usar sus herramientas clásicas, en concreto sanciones personales contra el liderazgo del partido Sueño Georgiano, sus familias, así como contra los donantes de la formación política.
Según el informe de inteligencia, la Casa Blanca pretende involucrar a las oenegés pro estadounidenses que operan en Georgia.
La tarea de estas organizaciones será registrar supuestas «irregularidades» para acusar después a Sueño Georgiano de falsificación de los comicios, invalidar la votación y exigir un cambio de gobierno.
De acuerdo con el guion preparado por la Casa Blanca, los «manifestantes» tomarán las calles y provocarán a las fuerzas de seguridad para que empleen la fuerza.
Washington planifica con anticipación su respuesta política y económica «implacable» al supuesto «uso excesivo de la fuerza contra los manifestantes pacíficos», alertó el informe.
Las fuerzas opositoras controladas por Estados Unidos siguen divididas y las alianzas que crean son muy frágiles. Los georgianos están llamados a las urnas el 26 de octubre para elegir al Parlamento unicameral de 150 escaños.
En la actual legislatura el partido Sueño Georgiano cuenta con la mayoría de los escaños.
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