En su más reciente informe sobre la crisis en el enclave costero, bajo ataque desde octubre de 2023, la Oficina de Medios del gobierno destacó que más de 40 mil personas perdieron la vida allí desde entonces, a los que se suman unos 10 mil desaparecidos.
Durante ese lapso fallecieron 82 trabajadores de la Defensa Civil y 172 miembros del sector periodístico.
El texto resaltó que se encontraron siete fosas comunes con un total de 520 cadáveres.
La Oficina alertó que unos 12 mil heridos y tres mil enfermos necesitan viajar al extranjero para recibir atención médica adecuada, pero alertó que los cruces fronterizos están cerrados por la vecina nación.
Unos 10 mil pacientes con cáncer se enfrentan a la muerte por la falta de medicamentos y de servicios ante la destrucción de hospitales y del equipamiento, señaló.
Desde octubre del pasado año se contabilizaron más de 1,7 millones de personas afectadas por enfermedades infecciosas como consecuencia del desplazamiento forzado, el hacinamiento, la falta de higiene y la contaminación del agua potable, subrayó.
El texto precisó que casi 60 mil embarazadas corren riesgo de perder a sus bebés debido a la falta de atención sanitaria.
Sobre los daños a la infraestructura, informó que 112 escuelas y universidades fueron completamente destruidas y otras 334 dañadas. En cuanto a las viviendas la cifra asciende a 150 mil y 200 mil, respectivamente, además de otras 80 mil que quedaron inhabitables.
Según el reporte, las Fuerzas Armadas israelíes lanzaron contra la Franja unas 82 mil toneladas de explosivos y bombas en apenas 11 meses.
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