Según el anuncio, los únicos candidatos elegidos para presentarse a los comicios del 6 de octubre son Ayashi Zammel, quien lidera un pequeño partido pro-empresario, y Zouhair Maghzaoui, un exparlamentario panárabe de izquierda.
Sin embargo, uno de estos candidatos, el empresario Zammel, fue detenido poco después del anuncio y está siendo investigado por supuestamente falsificar firmas de votantes registrados, reportan hoy medios de prensa locales.
Asimismo se recuerda que en total 17 personas habían presentado su candidatura a los comicios, entre ellos, los opositores Abir Moussi, el líder encarcelado del Partido Libre Destourian, y Abdellatif Mekki, exmiembro del partido islamista Ennahda.
En los últimos días, fueron desestimados recursos de apelación presentados por varios candidatos presidenciales opositores, entre ellos los de los activistas políticos Imed Daimi y Bechir Aouani.
Por su parte, el presidente del país, Kais Saied, manifestó que que no tolerará a quienes trabajan para desencadenar crisis, en relación con los políticos rechazados.
En 2022 se aprobó en Túnez una nueva constitución a través de un referendo que dejó establecido un sistema presidencial junto a un parlamento con poderes restringidos.
Poco antes, en 2021, Saied asumió todos los poderes cuando cerró el Parlamento electo dominado por la oposición, y pasó a gobernar por decreto para posteriormente asumir el control del poder judicial, acciones que fueron consideradas por la oposición como un autogolpe de Estado.
En los últimos tiempos la economía de Túnez esta en aguda crisis con una tasa de desempleo del 15 por ciento y un alto índice de pobreza.
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