La obra relata la historia de un hombre culto y pobre, quien trabaja como limpiador de zapatos en la ciudad de Nueva York, y ahí se encuentra con otros desplazados de la guerra quienes luchan en vano para hacer realidad sus sueños.
Al creer que logró su sueño anhelado tras encontrarse supuestamente de casualidad con una chica descubre luego que cayó en la trampa de un programa de cámara oculta, que hace que la chica gane millones de likes a expensas del sueño quebrado del hombre.
En declaraciones a Prensa Latina, el caricaturista internacional y autor de la obra Raed Khalil dijo que “Pedazo de Seño” arroja luz sobre temas sociales considerado sensibles y dolorosos, y los presenta de una manera que mezcla el llanto con la risa.
Es una obra que resume lo posible que no se logra por más que se prolongue la espera, pues muchas personas han muerto debido a la traicionera puñalada de un sueño, indicó.
Sobre esta experiencia, Khalil opinó que caricatura es el arte más cercano al teatro y es compatible con él en muchos detalles, y agregó que estos dos géneros expresan el estado de lo absurdo y grotesco que existe en nuestras vidas; el primero mediante el pincel y el segundo visualmente a través del escenario, y el factor del sarcasmo sigue siendo el denominador común.
En cuanto al título, indicó que cada persona tiene sueños que busca alcanzar, pero estos sueños no siempre se hacen realidad.
En el empeño de trasladar la caricatura al escenario, hice que los personajes se movieran con todas sus emociones, estados y psicología para arrojar luz sobre la realidad, precisó el artista.
El actor Ghassan Al-Debs, quien interpretó el personaje principal de la obra, afirmó a Prensa Latina que “en esta guerra lamentablemente tenemos nuestros sueños rotos y no tenemos nada perfecto excepto las pesadillas que nos llegan en su totalidad, y esta obra tiene una cierta peculiaridad ya que es una caricatura presentada en el marco del teatro.
La obra debe estar bien meditada para que sea comprensible ya que lleva mucha simbología en términos de dirección y diálogo, y la tarea del actor es esforzarse en completar el dibujo de la caricatura, aseveró el protagonista.
A su vez, la artista Madonna Hanna cree que el texto refleja lo simple y lo imposible, y se basa en la simbología. Intenté conciliar entre la caricatura y el teatro apoyándose en la presentación de pinturas caricaturescas sarcásticas, destacó.
No es ningún secreto que este método requiere mucha concentración, escrutinio e intuición por parte de los actores para que el receptor pueda comprender los detalles de la obra, afirmó la creadora.
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