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miércoles 4 de septiembre de 2024
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Arévalo reconoce deuda histórica con aldeas olvidadas en Guatemala

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Ciudad de Guatemala, 4 sep (Prensa Latina) El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, reiteró hoy el reconocimiento de su Gobierno de la deuda histórica con los pueblos y aldeas del país olvidados y marginados por un tiempo enorme.

Al inaugurar dos puestos médicos en el municipio de Chichicastenango, noroccidental departamento de Quiché, el mandatario aseguró que trabajan para empezar a saldarla por un bienestar de todos con sanidad, educación e infraestructura.

Ante autoridades ancestrales, líderes de las comunidades de Semejá II y Chugüexa II, funcionarios, participantes del proyecto Crecer Sano e invitados, el jefe de Estado afirmó que suman ya 13 los puestos de salud abiertos durante este año.

Al final del 2024 terminaremos la construcción de 37 puestos de salud, en comunidades carentes de acceso a esa atención integral para vivir mejor, remarcó el político de 65 años, abanderado del partido Movimiento Semilla.

Además estamos remozando 81 adicionales, en comunidades a las cuales vamos a llevar ese contacto más cercano con la salud, la esperanza, con la promesa de un futuro donde las madres puedan ser atendidas de manera segura, cerca de sus casas, describió Arévalo.

Destacó el trabajo del Ministerio de Salud y Asistencia Social, de las autoridades locales, líderes comunitarios, mientras llamó a accionar en unidad, para llegar lejos y salir adelante.

Tenemos un presupuesto ampliado que nos permite continuar llevando estos servicios, gracias a los diputados que apoyaron este compromiso con el pueblo, resaltó el exdiplomático y sociólogo de profesión.

El presidente invitó a las familias a usar estos servicios, a que de verdad acudan y cuiden los puestos como un tesoro compartido.

A su turno, el titular de Salud Joaquín Barnoya adelantó que los dos beneficiarán más de 10 mil poblaciones de comunidades históricamente abandonadas.

Sabemos que la salud es un derecho fundamental, y nuestro deber es asegurar que todos tengamos acceso a servicios de sanidad cerca de nuestros hogares, precisó el ministro.

Esos puestos son sólo el principio, ahora debemos aceptarlos, que funcionen adecuadamente, con transparencia, sin olvidar la humanización o dignificación del trabajador de salud pública, subrayó.

Que sean un símbolo de esperanza y bienestar, en los cuales cada uno de ustedes pueda recibir la atención que tanto necesitaron durante años, enfatizó Barnoya.

Al ser presentado por el Gobernante el 15 de julio pasado tras la renuncia de Óscar Cordón, el titular de Salud expresó que priorizaría la recuperación de la red de centros.

Mencionó las dificultades que la nación enfrenta por el abandono de los servicios públicos, especialmente los sanitarios, al tiempo que – aseveró- su plan busca entregarlos con calidad.

arc/znc

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