Noboa exigió un proceso de capacitación entre las fuerzas del orden y el Ministerio de Energía y Minas para que implementen las medidas de seguridad necesarias con el objetivo de “resguardar la infraestructura energética».
La pasada semana, el ministro de Defensa Gian Carlo Loffredo denunció un supuesto complot para agravar la crisis energética en el país y detalló que las Fuerzas Armadas investiga los indicios.
De acuerdo con Loffredo, «la evidencia es el robo de cables, afectaciones a las tuberías y la intromisión de personas para intentar detener la producción en uno de los pozos petroleros aquí», manifestó.
El funcionario hizo referencia a actos vandálicos registrados cerca de los campos petroleros en las provincias de Napo, Orellana y Sucumbíos, que ocasionaron pérdidas de siete mil barriles de crudo, según informó este lunes la estatal Petroecuador.
Esta no es la primera ocasión en que el Gobierno de Noboa denuncia una posible organización para afectar un servicio público.
El pasado mes de abril, el gobernante culpó a la exministra de Energía y Minas, Andrea Arrobo, y a exfuncionarios de esa Cartera de Estado de formar parte de una red que intentó sabotear el sector eléctrico.
La crisis energética en Ecuador ocasionó en junio pasado un apagón total en el territorio nacional.
Esa situación se agudizó a mediados de abril, con cortes de hasta 13 horas en algunos lugares y aunque los apagones se suspendieron oficialmente desde el 1 de mayo ha habido interrupciones por diversos motivos.
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