Nos enfrentamos a una de las masacres más horribles desde el inicio de la agresión israelí contra el territorio, hace 11 meses, hay familias enteras que desaparecieron bajo la arena a causa de los misiles, denunció la Defensa Civil.
Según la agencia oficial de noticias Wafa, el incidente ocurrió al filo de la medianoche cerca del hospital británico, a la entrada de la zona conocida como Al-Mawasi, en el sur del encave costero.
Las autoridades médicas alertaron que la cifra de víctimas aumentará en las próximas horas a medida que avancen los trabajos de recuperación.
Wafa, que citó a fuentes locales, informó que al menos cinco misiles impactaron contra el área, lo cual causó la destrucción de numerosas tiendas de campaña usadas por los refugiados y agujeros de hasta nueve metros de profundidad.
“La zona vive un estado de caos, con una fuerte presencia de aviones de reconocimiento israelíes sobrevolando el lugar, en medio de un corte total de energía y de incendios provocados por los bombardeos”, señaló.
Por su parte, la Sociedad de la Media Luna Roja Palestina advirtió que sus equipos de rescate enfrentan grandes desafíos para recuperar los cuerpos de los muertos y alcanzar a los heridos debido a la destrucción masiva y a los profundos cráteres.
El Ejército israelí justificó el ataque contra una zona llena de desplazados con el argumento de que estuvo dirigido presuntamente contra efectivos del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas).
En reiteradas ocasiones, las Fuerzas Armadas de ese país (FDI) atacaron Al-Mawasi, donde se refugian en apenas unos kilómetros cuadrados cientos de miles de palestinos.
El 13 de julio último casi 400 ciudadanos perdieron la vida o resultaron heridos en una incursión similar ocurrida en ese territorio.
Las FDI afirmaron entonces que el bombardeo tenía como objetivo eliminar a Mohammed Deif, jefe de las Brigadas Ezzedeen Al-Qassam, el ala militar de Hamas, y a otros comandantes como Rafa Salama, encargado del grupo en la gobernación de Khan Yunis.
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