Diariamente, miles de puertorriqueños a lo largo y ancho del país de 3,2 millones de habitantes, enfrentan la incapacidad del consorcio privatizador canadiense-estadounidense LUMA Energy de mantener la adecuada transmisión y distribución de la electricidad.
Hay municipios como Coamo, que llevan más de tres meses sumidos en la inestabilidad del sistema, se ven imposibilitados de mantener una vida normal, ya que las fluctuaciones en el voltaje dañan los electrodomésticos, esto sin contar las personas que necesitan estar asistidas de una máquina para dormir.
A esto se añade los miles de abonados sin servicio eléctrico por apagones selectivos debido a déficit de producción de energía de la privatizada GeneraPR, creada como parte del proceso de mantener el control de la estatal Autoridad de Energía Eléctrica, de cuyo presupuesto se nutre, al igual que LUMA Energy.
Los llamados relevos de carga iniciaron este miércoles a las 15:47 hora sin que se vislumbrara una solución hasta entrada la noche cuando la cantidad de abonados sin servicio ascendía a unos 184 mil abonados ante la salida de servicio de la generatriz EcoEléctrica, de la termoeléctrica AES, en el sur de Puerto Rico.
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