Una de las cuestiones señaladas es que la instancia judicial solo reconoce a cuatro de los siete menores de edad que fueron víctimas en los sucesos de la madrugada del 2 de septiembre, además de que varios de ellos no cuentan con los recursos para pagar su representación ante esa entidad.
El abogado Jacob Tshituka señaló que “es una situación deplorable para nosotros, defensores de los derechos del niño” y añadió que tres de estos menores de edad no han sido clasificados por el tribunal de menores, por lo que deben aportar pruebas de su minoría de edad, refirió Radio Okapi.
Se trata de víctimas de violación durante los sucesos, agregó, varias de las cuales perdieron sus bienes y necesitan ayuda de organizaciones humanitarias y de defensa de los derechos de las mujeres para que se conviertan en su voz.
“Es una cuestión y una petición que hacemos a las autoridades del país, para que comprendan que hay que eximir a estas mujeres del coste de los depósitos, para que sus derechos también puedan ser escuchados por los tribunales”, enfatizó Tshituka.
Otra irregularidad denunciada es el procesamiento como acusado de violación de un recluso que en ningún momento ha sido denunciado como tal.
En las vistas de instrucción las víctimas lo exculparon e incluso señalaron que se trata de una persona que asistió a otras cuando estaban en peligro.
El Ministerio Público no puede detener a alguien por imaginación, insistieron los abogados de la defensa.
El pasado jueves se abrió un juicio por el intento de fuga en la cárcel central de Makala, donde según Radio Okapi se identificaron ante el tribunal dos grupos de presos implicados en los hechos.
El primero está formado por cuatro acusados, entre ellos dos soldados y un policía, a quienes se les imputan cargos de incendio, violación, terrorismo e intimidación de cinco detenidas.
En tanto, el segundo grupo incluye 30 reclusos que intentaron fugarse de la prisión y son acusados de destrucción dolosa, incendio provocado y terrorismo.
El medio de prensa señala que 13 víctimas de violación reconocieron los rostros de sus agresores.
En la madrugada del 2 de septiembre se reportaron disparos durante varias horas en la cárcel central de Makala, donde los presos intentaron salir de sus celdas.
Como resultado de los sucesos murieron 129 personas y 59 resultaron heridas, además de registrarse daños materiales al centro penal.
mem/kmg
