La mayoría de los diarios oscilan entre el gélido titular de portada del tradicional El Comercio, que simplemente dice: “Alberto Fujimori murió a los 86 años”, aunque el tabloide Correo, del mismo grupo mediático, ensalza al difundo con el título “Fujimori en la historia”.
El rotativo opositor “La República” cubre su primera plana con el titular “Falleció exdictador Alberto Fujimori” y señala que durante el gobierno de los 90 del siglo pasado se violaron sistemáticamente los derechos humanos y se extendió la corrupción.
Añade que Fujimori fue condenado por crímenes de lesa humanidad (como autor mediato) y salió libre en diciembre de 2023 por un indulto declarado ilegal por la justicia y validado por el Tribunal Constitucional.
El diario Uno destaca en la portada que no solo falleció Fujimori sino “Murió el fujimorismo”, lo que muchos se plantean con signos de interrogación, y agrega que “Con la partida del exdictador, el fujimorismo, con una Keiko Fujimori que perdió tres procesos electorales y es repudiada por la gran mayoría de los peruanos”.
El analista neoliberal Jaime de Althaus aborda tangencialmente el tema, al apuntar que el partido Fuerza Popular, que encabeza Keiko Fujimori, “no ha logrado procesar reflexivamente la década de los 90, que tiene muchas cosas positivas”.
El expresidente neoliberal (2016-2018) Pedro Pablo Kuczynski, por su parte, calificó como positivo el saldo de un balance entre lo que considera aciertos, sobre todo la estabilización económica neoliberal, y los errores, como llamó a las violaciones de derechos humanos y la corrupción de aquel decenio.
Reflejó así la posición de partidos de derecha en todos sus matices y parte de los proclamados centristas, mientras la izquierda señala las matanzas, desapariciones y torturas y la gran corrupción como sello del régimen de los años 90 del siglo pasado.
Kuzynski intentó como presidente conciliar con la mayoría parlamentaria fujimorista indultando a Fujimori, pero tuvo que renunciar tras la encarnizada oposición de esa mayoría liderada por la hija del exgobernante, Keiko, quien no se resignaba a haber sido derrotada en la segunda vuelta presidencial, como le ocurrió también en las presidenciales de 2016 y 2021.
La excandidata presidencial progresista Verónika Mendoza escribió un fulminante mensaje de Twitter: “No, no olvidamos la corrupción, secuestros, torturas, asesinatos, esterilizaciones forzadas, diarios chicha (periódicos sensacionalistas pagados por el gobierno fujimorista)… Y seguiremos luchando para derrotar el régimen entreguista, corrupto y violento que instauró”.
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