La policía empleó carros lanza agua y uso excesivo de la fuerza para reprimir y detener a cuatro adolescentes del Liceo 1 Javiera Carrera, en pleno centro de Santiago.
“No se pueden tolerar situaciones de violencia desproporcionada hacia estudiantes”, denunció la Defensoría de la Niñez, y anunció la decisión de pedir investigaciones a las autoridades correspondientes sobre lo ocurrido. A causa de la brutalidad policial una de las cuatro estudiantes presenta heridas leves y fue llevada al servicio de urgencia de un recinto hospitalario, confirmó la entidad.
Responsables del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) llegaron hasta la 48 comisaría de carabineros para entrevistar a las alumnas que fueron arrestadas e interesarse por su estado de salud.
Beatriz Contreras, jefa del INDH en la Región Metropolitana de Santiago, expresó su preocupación por la manera violenta usada contra las estudiantes.
Por su parte, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del senado, Fabiola Campillai, visitó a los familiares de las adolescentes arrestadas la víspera en las afueras del Liceo 1.
Campillai es una de las víctimas de la represión policial contra el estallido social de 2019, cuando una bomba lacrimógena lanzada por un carabinero le impactó en el rostro y le provocó la pérdida total de la visión y fracturas en la cara y el cráneo.
Más de 400 personas sufrieron daños oculares a causa del uso desproporcionado de la fuerza durante las protestas de hace cinco años contra el modelo neoliberal.
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