Según el director ejecutivo de la Cámara de Industrias, Producción y Empleo de Cuenca (Cipem), entre las más afectadas se encuentran las industrias manufactureras porque tienen turnos de producción en los horarios programados para los apagones.
Robalino dijo al Portal Digital Primicias que la mayoría de las industrias manufactureras, al menos en el sur del país, funcionan de manera intensiva, con tres turnos de ocho horas, mencionó.
«Un turno tendría que salir de operación, lo que representa un tercio de la producción de cualquier industria de este tipo», añadió.
De acuerdo con el Cipem, cada hora de corte de luz representa hasta 1,2 millones de dólares de pérdidas para estas empresas, por lo que estos cuatro días de apagones nocturnos costarán 38,4 millones de dólares a las industrias.
Este martes, el Gobierno de Ecuador anunció que habrá apagones de ocho horas en todo el territorio nacional debido a la crisis de generación eléctrica que enfrenta el país.
A través de un comunicado, el Ejecutivo detalló que la medida estará vigente desde el próximo lunes hasta el jueves 26 de septiembre.
En el texto, el Gobierno de esta nación sudamericana justificó los cortes para evitar “el peor estiaje de los últimos 61 años, y para manejar de forma responsable el control del sistema eléctrico”.
Asimismo, el documento especificó que teniendo en cuenta las afectaciones de los servicios, se implementará la modalidad de teletrabajo en el sector público durante esos cuatro días.
También el presidente Daniel Noboa anunció un apagón nacional que tendrá lugar desde mañana hasta el amanecer del jueves, con el objetivo de trabajar en el fortalecimiento del sistema de transmisión y redes de distribución para afrontar la crisis eléctrica, señaló el mandatario.
Las labores se realizarán desde las 22:00, hora local, del 18 de septiembre hasta las 06:00 del día siguiente, según detalló un comunicado difundido por la red social X de la Presidencia.
De acuerdo con el texto, el horario se eligió para evitar una afectación al desarrollo productivo y a la vida cotidiana de los ciudadanos aquí.
La crisis energética en esta nación sudamericana se agudizó a mediados de abril, con cortes de hasta 13 horas en algunos lugares y aunque los apagones se suspendieron oficialmente desde el 1 de mayo ha habido interrupciones por diversos motivos.
En ese contexto, una ola de violencia e inseguridad vuelve a golpear al territorio nacional pese a la presencia de militares en las calles y los reiterados estados de excepción decretados por el Ejecutivo.
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