«El mero uso de dispositivos electrónicos del hogar como artefactos explosivos requiere de una investigación pertinente. La posibilidad de fabricar en masa semejantes ‘armas’ eleva el terrorismo a un nuevo nivel», alertó Volodin en su cuenta de Telegram.
El jefe de la Duma igualmente especificó que se trata de una amenaza global para todos los países, e instó a investigar a fondo lo ocurrido en Líbano, alegando que «un ataque planificado con el uso de altas tecnologías podría acarrear consecuencias graves en el mundo».
Decenas de personas fallecieron y miles resultaron heridas en Líbano en dos oleadas de explosiones de bíperes, walkie-talkies y otros dispositivos de comunicación el martes y el miércoles, según el Ministerio de Salud libanés.
El movimiento Hizbulah, cuyos militantes representan el grueso de las víctimas, responsabilizó a Tel Aviv de ese ataque y prometió vengarlo.
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