La ministra de Ambiente, Inés Manzano, quien preside el COE en esta nación sudamericana alertó que Ecuador atraviesa condiciones climáticas anómalas que afectan la agricultura, el abastecimiento de agua y la generación hidroeléctrica.
Manzano detalló que el Ejecutivo solicitará recursos al Ministerio de Finanzas, mientras que a los municipios pedirán información del estado de desabastecimiento de agua potable en sus territorios.
Más de mil 300 incendios forestales han azotado a Ecuador como consecuencia de la sequía, con impacto en la economía, la agricultura y la flora y fauna en el territorio nacional.
La caída del nivel de los principales embalses aquí activó las alertas ante el retorno de los apagones.
El Operador Nacional de Electricidad (Cenace) advirtió que la mayor preocupación es la fase más grave de la temporada de estiaje, que inicia el próximo mes de octubre.
Este lunes, el presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos de Pichincha, Marco Acuña, advirtió que el sistema eléctrico de Ecuador se encuentra “totalmente debilitado”, situación que empeora la crisis en ese sector.
El experto insistió en que la medida del apagón a escala nacional por horarios se tomó porque el sistema no tiene la capacidad para conducir la energía por otros sectores mientras se hacen los mantenimientos, pero también con el objetivo de precautelar el agua de los embalses.
Acuña reiteró la necesidad de dar mantenimiento en todo el sistema eléctrico de Ecuador. “No se ha estado haciendo y como consecuencia de eso tenemos una buena cantidad del parque generador que no está produciendo energía. A eso se debía haber apuntalado hace años”, dijo.
Asimismo, el funcionario atribuyó la crisis a la falta de continuidad y planificación en el sistema eléctrico por parte de los gobiernos.
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