La reunión estuvo encabezada por el jefe de Estado de Angola, João Lourenço, en calidad de presidente en ejercicio de ese organismo, que adoptó una Declaración en la que expresa una amplia solidaridad con el pueblo haitiano.
Lourenço aludió a la necesidad de brindar apoyo tangible a esa población en medio de la grave inestabilidad política y el deterioro de la seguridad persistentes, y exhortó a la comunidad internacional a permanecer a su lado en estos momentos, indicó una nota del Jornal de Angola.
“La gravedad de la crisis en Haití exige una acción inmediata y coordinada, no sólo con palabras, sino con hechos”, remarcó el mandatario angoleño.
El presidente de la OACP estuvo acompañado en el encuentro por el secretario general de la organización, Georges Chikoty, junto a quien condujo los debates sobre los desafíos financieros del ente.
Al respecto insistieron en resolver las dificultades actuales, pues sin financiamiento se corre el riesgo de socavar la capacidad de servir eficazmente a los intereses de los pueblos y de los 79 Estados miembros.
Lourenço llegó a Nueva York la víspera y en la jornada de este lunes intervino en la Cumbre del Futuro.
En la cita, el mandatario subrayó que el mundo necesita evolucionar hacia una arquitectura de paz en la que se defienda y proteja el principio de seguridad compartida, y donde ningún ciudadano, Estado, región o zona geográfica se sienta protegido a costa de la inseguridad de los demás.
“Angola cree que no es posible construir un mundo equilibrado, seguro y sostenible en el que la dignidad y el acceso a las oportunidades sean beneficio exclusivo de un pequeño grupo de privilegiados, en detrimento de la mayoría de la población mundial”, enfatizó.
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