El primer lugar en la premiación, según la nota, fue otorgado a la cinta Adiós tortuga, de la directora turca Selin Oksuzoglu, por un jurado compuesto por el director Carlo Sironi, el crítico de cine Paolo Fossati y la actriz Liliana Fiorelli.
El corto «Cuatro hoyos» de la realizadora cubana se destaca «por su estilo original y experimental, y pone en escena la memoria de un pasado, pero también los escenarios del presente, los ruidos, los colores, los espacios”, apunta un reporte publicado en el diario especializado Frame.
Muñoz logra de esa forma “documentar en pocos minutos una vida”, la de José, un carismático anciano apasionado por el golf, añade esa publicación.
La cinta de Ocsuzoglu describe la historia de Inci, un niño de cinco años, quien deambula solo por las montañas, cerca del mar Negro, tras la muerte de su madre.
El tercer puesto lo obtuvo el cineasta palestino Moatasem Taha, con En la sala de espera, sobre Hussien, un joven de 30 años quien después de ser desplazado en 1948, acompaña a su madre, de 70, a una cita médica en un hospital israelí.
La VII edición del Festival de Cine de Orvieto, que se celebró del 22 al 29 de septiembre, tuvo como escenario el Teatro Mancinelli, de esa ciudad de la provincia de Terni, e incluyó la presentación de 27 cortometrajes procedentes de 19 países.
Daniela Muñoz es una joven documentalista y productora cubana, quien en 2017 se graduó como directora de fotografía en la Universidad de las Artes de La Habana.
Entre sus realizaciones se encuentra el documental Mafifa, realizado en 2021, seleccionado para competir en más de veinte eventos internacionales y ganador del premio Fipresci en el Flying Broom International Women’s Film Festival en Ankara, Turkiye.
También filmó en 2021 el documental experimental Umbra, estrenado en Festival Internacional de Cine de Viña del Mar, Chile, y con el que también participó en 2022 en el programa Open Doors Immersion del Festival de Locarno, Suiza.
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