Los movimientos telúricos en esa región del Valle Central pueden provocar daños severos contra una población que representa el 65 por ciento del total del país, declararon estudiosos del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de la Universidad Nacional (Ovsicori-UNA), según el canal Teletica.
Algunas investigaciones documentaron 110 fallas a nivel nacional, muchas de ellas aún por mapear, que varían en longitud, geometría y capacidad elástica, factores que influyen en su potencial sísmico como ocurre en la GAM, aseguró el experto del Ovsicori-UNA Esteban Chaves, citado por la televisora.
La parte central del país alberga entre 50 y 60 fallas activas, distribuidas en una franja que se extiende entre la sur oriental región de Puntarenas y la centro oriental de Limón, conocida como el Cinturón Deformado del Centro de Costa Rica, estimó por su parte el analista Lepolt Linkimer, de la Red Sismológica Nacional.
«Aunque estos movimientos –señaló- no son tan intensos como los de la costa del Pacífico o el Caribe Sur, la cercanía de estas fallas a la GAM implica un riesgo significativo. La proximidad del epicentro a zonas habitadas es un factor clave en el impacto destructivo de un terremoto».
De acuerdo con el experto, como el tamaño de las fallas y la rapidez con que acumulan fuerzas tectónicos son determinantes en su potencial, las mayores pueden generar sismos de hasta 6,5 de magnitud, potencial destructivo “que tendría en la GAM consecuencias graves dada la densidad poblacional”. Los expertos describieron con esas características seis zonas de fallas con potencial significativo para la GAM, como la de Agua Caliente, ubicada en Cartago y causante del devastador terremoto de 1910, la de Río Azul, de Tres Ríos a Desamparados, y la de Patillos, al sur de la provincia de San José.
Las otras tres zonas con ese poder telúrico son la situada entre Escazú y Santa Ana, con múltiples fallas pequeñas activas en una zona altamente urbanizada, el sistema de El Ángel, conocido por el terremoto de Cinchona, en 2009, y la de La Garita, dentro de la GAM.
“Estas seis regiones demostraron tener un gran potencial destructivo”, opinó Chaves y agregó que el sur de San José, el sur de Cartago y el norte de Alajuela «son áreas históricamente complejas en términos sísmicos».
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