Una encuesta del no gubernamental Instituto de Estudios Peruanos (IPE) verificó una caída de la aprobación a la mandataria de un punto respecto al mes anterior, que redujo a cinco por ciento las opiniones favorables a la gestión de Boluarte, mientras el Congreso repitió el cinco por ciento de agosto.
La desaprobación al Parlamento, creció de 91 a 92 por ciento y se acerca a la unanimidad, mientras que en el caso de la jefa de Estado subió dos puntos, a 90 por ciento.
La ex ministra de la Mujer y socióloga, Anahí Durand, opinó que “Ya resulta ocioso compartir datos sobre la aprobación de Dina Boluarte y el Congreso”.
“El pueblo los rechazó en encuestas y calles desde que iniciaron su nefasto cogobierno el 7 de diciembre de 2022 y esas cifras no se van a revertir, al contrario, ambos profundizan la crisis con su incapacidad”, aseveró.
Desde la derecha del espectro político, el ex ministro de Trabajo y ex parlamentario, anotó que “si usted coloca al frente a 10 peruanos y les pregunta quién apoya a Dina Boluarte, ni uno levantaría la mano”.
El ex primer ministro y militar retirado, Óscar Valdés, consideró grave la orfandad de apoyo popular a la Presidenta y señaló que tal situación se debe a que carece de capacidad para gobernar y debería analizar la posibilidad de dimitir o al menos cambiar su gabinete ministerial.
Para el diario La República, los resultados del sondeo ponen al Gobierno y al Parlamento en “una situación de precariedad absoluta para la legitimidad y una posición que entraña graves peligros para la gobernabilidad”.
Agrega que en las regiones norte, centro y sur del país y en las zonas rurales, la aprobación se reduce en algunos casos a tres por ciento y la mayor aprobación, en Lima Metropolitana, apenas alcanza al ocho por ciento.
“Es este, sin duda, el gobierno peor evaluado de la historia contemporánea reciente. No hay ninguno que haya tenido tan malas cifras y sobre todo tan pronto”, señala, aludiendo al hecho de que Boluarte solo lleva menos de dos años en el cargo.
Como contexto de la encuesta menciona el desborde de la criminalidad, un paro de transportistas en demanda de seguridad frente a las extorsiones y el sicariato y los incendios forestales atendidos tardíamente, entre otros factores.
Ayer, tras publicarse los resultados de la encuesta del IEP, la mandataria pareció irritada al mostrar a sus críticos como mentirosos y empeñados en crear caos por envidia y sostuvo que ella nunca miente.
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