El diplomático conversó sobre la situación de choferes que trasladan mercancías desde Angola por carretera, con destino a Cabinda o a la propia RDC, y quienes enfrentan diversas dificultades actualmente, explicó a la Agencia Congoleña de Prensa.
“Hemos tenido algunos incidentes con transportistas por carretera, vehículos con mercancías que salían de Angola hacia la RDC; hablamos de eso. Lo que reitero aquí es que Angola y la República Democrática del Congo son países hermanos, son el mismo pueblo”, afirmó.
Remarcó que ambas naciones están unidas por aspectos históricos, realidades geopolíticas y geoeconómicas, comparten una frontera de dos mil 511 kilómetros y sus pueblos están hermanados.
“Tenemos vínculos culturales y étnicos; encontraréis la misma gente del lado de Angola y del lado del Congo; Lubas en Angola y Luba en Congo, Tchokwés en Congo y Tchokwés en Angola, Bakongo en Angola y Bakongo en Congo. Es el mismo pueblo, es la colonización la que nos separó”, argumentó el embajador.
La víspera el ministro de Relaciones Exteriores de Angola, Téte António, convocó al embajador de la RDC en Luanda, Kalala Mayiba Constantin, para protestar por malos tratos hacia transportistas angoleños.
António expresó al diplomático “su profundo disgusto” por el trato inapropiado que los camioneros de su país recibieron en la RDC, así como por la posición unilateral de las autoridades de la nación vecina sobre la prohibición de circulación a través de su territorio hasta la provincia de Cabinda.
Ambas partes discutieron diversos problemas que enfrentan los camioneros angoleños dentro de la RDC, donde se han denunciado incluso algunas violaciones de sus derechos.
El canciller llamó a que “las autoridades congoleñas tomen medidas adecuadas para poner fin a esta situación y resolver los conflictos a través de los mecanismos existentes, respetando los instrumentos jurídicos firmados entre los dos países, incluidas las disposiciones contenidas en el Acuerdo sobre carreteras de transporte”.
Angola y la RDC comparten una vasta frontera terrestre, marítima y fluvial, y en particular la provincia angoleña de Cabinda tiene una situación especial, pues para acceder a ella por tierra desde Angola es preciso atravesar el país vecino.
Las dificultades en este paso fronterizo persisten desde hace meses y en febrero de este año incluso hubo una paralización de los camiones de carga en protesta por los excesivos derechos de Aduana aplicados por Kinshasa.
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