Como cierre de una jornada científica desarrollada en esta ciudad, ubicada a 278 kilómetros al este de La Habana, la doctora Marta Monzón Quintero, Jefa del Programa del Adulto Mayor en la central provincia, señaló como un reto la existencia de más de 203 mil personas de la tercera edad, el 26.9 por ciento de la población.
Según dijo, entre ellos existen 188 ancianos centenarios, mientras que más de 46 mil viven solos o conviven con otros adultos mayores, una realidad que implica garantizar un cuidado integral a nivel comunitario, institucional y hospitalario.
Para ello, en Villa Clara funcionan 35 equipos multidisciplinarios de atención gerontológica, 27 casas de abuelos y 16 hogares de ancianos, como parte de un programa estratégico, enfocado a la protección de los ancianos y a crear las condiciones necesarias para la incorporación laboral de los familiares cuidadores.
De acuerdo a la doctora Mayelín Vara Hernández, directora del Hogar de Ancianos 4 de Santa Clara, estas instituciones potencian los grupos recreativos y de orientación, garantizan las consultas médicas de especialidades como geriatría, podología y psicología, y establecen alianzas con centros deportivos y de educación para organizar actividades de esparcimiento con los abuelos.
Entre los retos del territorio para consolidar la atención al adulto mayor, Monzón Quintero señaló el completamiento de las capacidades creadas en casas de abuelos y hogares de ancianos, así como la consolidación de estrategias de trabajo dirigidas a asegurar la independencia del adulto mayor y fomentar una longevidad saludable.
Cuba, uno de los países más envejecidos de América Latina, implementa desde 1996 un Programa Nacional de Atención Integral al Adulto Mayor y un conjunto de políticas estatales encaminadas a fomentar la calidad de vida de las personas con 60 años o más.
Cabe destaca que todas estas estrategias tienen una expresión en la Constitución de la República y en el amplio cuerpo legislativo del país.
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