De acuerdo con un informe de su Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, la región es escenario de algunas de las crisis humanitarias más grandes del mundo.
Entre otras causas, esa entidad advirtió del impacto del cambio climático, los conflictos, la inestabilidad política, los choques económicos y los brotes de enfermedades.
Otras amenazas para la salud como el cólera, el sarampión y la pox o viruela del mono ponen en riesgo a los habitantes del este africano, donde se detectaron cerca de 776 casos de esta última.
Mientras la ONU mantiene su asistencia, alerta sobre los escasos fondos para esta crisis, pues
a finales de septiembre solo disponía del 38 por ciento de los nueve mil 300 millones de dólares necesarios para los esfuerzos de respuesta humanitaria en esa área geográfica, lo que restringe la capacidad para ampliar las operaciones a medida que aumentan las exigencias.
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