Por medio de una cadena nacional, el mandatario explicó cómo la fórmula anterior dio origen a una pesada obligación para quienes con mucho esfuerzo abonan mes a mes, e incluso, a aquellos que no lograron finalizar sus estudios y aún así están muy endeudados.
El CAE se convirtió en un grave problema para los estudiantes y sus familias, dijo, pero también para el fisco que no logra recuperar lo invertido en ese beneficio.
Con el propósito de resolver esta situación se presentará este martes un proyecto de ley al Congreso Nacional, basado en tres criterios.
El primero es condonar parte de la deuda a todos los involucrados en base a un porcentaje a definir, según si el interesado terminó o no su carrera, si tiene su compromiso al día y de acuerdo al número de cuotas pagadas a la fecha.
Otro es reorganizar los créditos pendientes con dos alternativas, una es que si ya está pagado el 75 por ciento se ponga fin a la obligación o, en caso contrario, reprogramar las cuotas proporcionalmente a los ingresos de cada persona.
El tercer criterio es eliminar el CAE a partir de la aprobación de la ley y sustituirlo por el nuevo instrumento denominado Financiamiento Público para la Educación Superior (FES) el cual, según el presidente, será más flexible y menos oneroso.
Quienes se adhieran a este sistema no pagarán aranceles ni otras contribuciones mientras estudien y, por lo tanto, no acumularán deudas.
Al año de estar incorporados al mundo laboral, comenzarán a realizar una retribución nunca mayor al ocho por ciento de sus ingresos y por un tiempo igual a la duración de la carrera, y eso permitirá financiar a otros estudiantes.
Corresponderá ahora al Congreso tomar la decisión correspondiente, señaló el presidente Boric.
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