Así lo comentó a Prensa Latina antes de su regreso a Cuba tras la exitosa presentación en Nueva York del texto inspirado en la icónica cantautora Sara González.
“Fueron cuatro presentaciones en esa ciudad”, explicó al señalar “que no esperaba tan numeroso público y que este a su vez resultara tan sensible y con una memoria musical tan marcada de esa época”.
Yo digo que la Nueva Trova es como la banda sonora de la Revolución cubana, ellos le cantaron a todo: al amor, la vida y la propia obra del proyecto social que se construye en mi país desde el 1 de enero de 1959, afirmó Fernández, graduada en la Universidad de Oriente como Licenciada en Periodismo en 1985.
“El libro lo escribí durante la pandemia de la Covid-19, fue un aliento que encontré durante el incierto momento de la emergencia sanitaria y por eso creo que trasciende a la figura de Sara”, comentó.
Para todos los testimoniantes -dijo- fue como una introspección antropológica de ese tiempo, contextualizado hasta el presente.
Fernández expresó su satisfacción por “ver llenos los espacios de la Dirección de Cultura Dominicana en el Exterior, en las alturas de Manhattan; La Sala de Pepe, un área comunitaria de la 73 avenida Loisaida y el Bronx Campus del Boricua College”.
Asistieron profesores de diversas nacionalidades de la universidad multicultural y la Casa de la Herencia Cultural Puertorriqueña del Barrio Artspace y en todos los lugares fue muy linda la acogida para el libro, añadió.
El volumen, de 390 páginas, “culmina con un homenaje a Pablo Milanés, quien falleció en el contexto de su realización”.
Contiene -agregó- testimonios inéditos de los fundadores de la Nueva Trova, como el entrañable Silvio Rodríguez y otras personalidades de la cultura latinoamericana.
“Entrevisté a la mayoría de los principales trovadores cercanos a Sara González, en un momento en que necesitábamos asirnos a la belleza”, subrayó Fernández, quien utilizó también el testimonio fotográfico en su obra.
Lamentablemente, tres de los fundadores de la Nueva Trova murieron después de conversar con ellos, por lo que resulta un valioso documento histórico, con recuerdos humanos y artísticos de Vicente Feliu, Lázaro García y el más joven de todos, Ángel Quintero, acotó.
“La Pasión sin Matices la presenté el pasado año en espacios culturales de San Juan, Caguas y Mayagüez, en Puerto Rico; también presenté otras obras en ferias literarias de Cuba, Colombia y México”, argumentó la también autora de varias biografías de artistas y personalidades.
Sus otros libros son “Testimonio de Alberto Granado” y “Daniel Santos. La Habana que hay en mí”, este último mostrado igualmente al público latino y estadounidense en Nueva York.
Según la exreportera de la TV Cubana, “los libros disponibles en Amazon, han creado gran expectativa entre los lectores residentes en Estados Unidos, cultores de la música de la isla”.
npg/dfm
