La comunicación precisa que en términos físicos, las importaciones también aumentaron 1,6 veces, alcanzando 7,3 millones de toneladas, recayendo la mayor parte de las compras en combustible diesel, cuyas importaciones se multiplicaron y ascendieron a 4,4 mil millones de dólares.
Además, Brasil comenzó a importar de Rusia gasolina no aeronáutica por valor de 247,7 millones de dólares, pero dejó por completo de comprar nafta, que se utiliza en la industria petroquímica.
Al mismo tiempo, el volumen de compras de otros tipos de productos petrolíferos se multiplicó por 1,5, alcanzando 397,7 millones de dólares.
Rusia sigue siendo el líder entre los proveedores de productos petrolíferos a Brasil, por delante de Estados Unidos, que exportó productos por valor de dos mil 800 millones de dólares durante el mismo período.
España quedó en tercer lugar con 541,7 millones de dólares en exportaciones. Los Países Bajos y Kuwait también suministraron volúmenes importantes de productos, con volúmenes de 497,4 millones de dólares y 459 millones de dólares, respectivamente.
Los mayores exportadores de productos petrolíferos a Brasil este año también incluyeron a los Emiratos Árabes Unidos, Argelia, India y Omán. Estos países proporcionaron un suministro combinado de mil 400 millones de dólares.
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