De acuerdo con las fuentes, un bombardeo israelí con misiles destruyó uno de los puentes que comunica las zonas de Hosh Al-Sayyid Ali y Hermel, en la frontera entre Siria y Líbano.
El puente, que se encuentra cerca de la ciudad siria de Qusseir en la provincia de Homs, es usado por civiles que huyen de los bombardeos israelíes para entrar a Siria de forma irregular.
Asimismo, varias explosiones se escucharon en la provincia de Deraa en el sur del país, resultantes de bombardeos israelíes contra puntos militares sirios en la localidad de Al-Jidur, al norte de Deraa.
El ataque ocurrió pocas horas después del lanzamiento de dos drones hacia posiciones militares israelíes en el Golán sirio ocupado.
En la provincia de Deir Ezzor, ubicada a unos 450 kilómetros al nordeste de Damasco, la capital siria, se produjeron explosiones en las cercanías de la cabecera provincial resultantes de bombardeos con artillería de las tropas del Pentágono desplegadas ilegalmente en los campos petroleros de Al-Omar y Konico. Aún no hay reportes oficiales si estas hostilidades causaron pérdidas humanas.
El pasado miércoles, bombardeos israelíes contra Siria apuntaron contra una planta de coches, un centro de ayuda humanitaria y una posición militar, en las provincias de Homs y Hama en el centro del país.
Horas antes de estas acciones hostiles, un agente policial perdió la vida y otro resultó herido en un ataque israelí en la provincia de Quneitra, ubicada a 67 kilómetros al suroeste de esta capital y fronteriza con el Líbano y los territorios palestinos ocupados.
Mientras el último martes, nueve civiles murieron y 14 resultaron heridos en un bombardeo con misiles contra un edificio residencial y comercial en Mezzeh, un barrio densamente poblado en Damasco.
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