El presidente de la República, José Raúl Mulino, encabezó el inicio de la estrategia, que en las primeras 24 horas detuvo a 148 personas asociadas al crimen organizado.
“Este plan tiene como objetivo liberar a Panamá de las pandillas. Iremos casa por casa, finca por finca, o donde se escondan los pandilleros, para llevarlos al lugar que les corresponde: la cárcel”, manifestó el gobernante.
Según explicó el mandatario en un acto en la Policía Nacional, para este programa se incorporarán unos mil 32 agentes en los principales puntos conflictivos como la provincia de Colón (Caribe), de las más peligrosas; Panamá Oeste (contigua a la capital), el distrito de San Miguelito (barrio periférico con altos índices de inseguridad), el área del Canal y otras zonas populares cercanas a la urbe metropolitana.
«Todo esto tiene un único fin: que cada trabajador panameño sienta que vuelve la paz y la seguridad. El desafío es grande, fueron muchos años de falta de liderazgo dando rienda suelta al crimen organizado en todo el país”, remarcó.
Estadísticas oficiales señalan que el 19 por ciento de los 556 homicidios registrados en el país en 2023 ocurrieron en Colón y el 18 por ciento en San Miguelito, que se posicionaron así como la segunda y tercera zona más violenta del istmo, solo superada por Panamá, que registró el 38 por ciento.
Los agentes cuentan ahora con patrullaje vehicular, puntos de controles móviles y retenes policiales, según adelantó Mulino, para enfrentar a las bandas que operan al margen de la ley, muchas de ellas asociadas al narcotráfico.
El jefe de Estado anunció además que el toque de queda implementado para menores de edad desde agosto último a partir de las 21:00 y hasta las 06:00 hora local como norma, en Colón y San Miguelito, podría ampliarlo a toda la población, una medida que debe ser consensuada con las autoridades de esos territorios.
En los últimos siete días, la Confederación Nacional de Unidad Sindical Independiente (Conusi)presentó sus propuestas para reformas a la Caja de Seguro Social (CSS), antes de que el Gobierno comenzara a evaluar la viabilidad de las iniciativas de otros sectores que incluirá en un anteproyecto de ley .
El secretario general de Conusi, Marcos Andrade, insistió en el sistema solidario para el pago de pensiones y su rechazo a medidas paramétricas como elevar la edad de jubilación y las cuotas obrero patronales.
También cuestionan la privatización de otros servicios que presta la única entidad pública que atiene a jubilados y pensionados y estiman que el Estado deberá incrementar su aporte a los fondos de la CSS.
El dirigente sindical precisó que es creciente el rechazo de varias organizaciones sociales invitadas a esas deliberaciones a las cuentas individuales que impulsa el sector privado, las cuales llevarían a los obreros a la miseria y la pobreza.
Conusi convocó recientemente a una megamarcha popular el próximo 17 de octubre, para partir desde el emblemático parque Belisario Porras, en esta capital, hacia la Presidencia de la República para esbozar allí su proyecto entre cuyos puntos sobresale cambiar el actual modelo económico neoliberal que las pensiones como un negocio, en detrimento de una jubilación digna.
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