Desde este sábado y hasta el 11 de noviembre los consumidores pasarán a pagar 2,56 dólares por galón de las gasolinas de bajo octanaje, 0,03 centavos menos que el mes pasado.
Mientras que el precio del galón de gasolina Súper será 0,10 centavos de dólar menos que en septiembre y quedará en 3,80 dólares por galón.
Este descenso de los valores llega mientras el país atraviesa una crisis energética con apagones de 10 horas diarias y en consecuencia aumenta el consumo de combustibles para abastecer generadores.
Petroecuador informó que cuenta con reservas suficientes para atender la demanda de diesel industrial.
El pasado mes de junio, el presidente Daniel Noboa eliminó los subsidios a los combustibles y en ese momento, el galón de las gasolinas de bajo octanaje pasó de 2,42 a 2,72 dólares.
El mandatario determinó que el costo variaría mensualmente en dependencia del mercado internacional.
De acuerdo con lo establecido, el precio puede subir hasta un cinco por ciento o bajar hasta un 10 por ciento.
Si bien lleva dos meses consecutivos a la baja, los actuales valores sí son superiores a cuando estaba en vigor el subsidio.
Incrementar el precio de los combustibles implica “elevar el costo de la vida y condenar a más ecuatorianos a la pobreza”, alertó hace unos meses el presidente de la Unión Nacional de Educadores, Andrés Quishpe.
Pese a algunas protestas, el Gobierno de Noboa no enfrentó gran resistencia a la eliminación de los subsidios a los combustibles, como ocurrió en 2019 y 2022, cuando diversos sectores sociales salieron a las calles en históricas manifestaciones contra los intentos de aplicar esa medida.
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