El titular de esa cartera Francisco Jiménez explicó que la entrega incluirá no solo la infraestructura, sino también la implementación de protocolos y procedimientos rigurosos de control dirigidos tanto a reclusos como a los guardias.
Llevaremos a ese centro a 260 privados de libertad que impactan más en la criminalidad a la población, subrayó el funcionario en declaraciones la semana pasada a Emisoras Unidas, sin precisar fecha por motivos de seguridad.
“No solo es pintura, sino que incluye un rediseño, una reconstrucción, que permita que se limite la posibilidad de acceso a comunicación externa por teléfonos o demás dispositivos”, describió Jiménez.
Resaltó que desde que tomó posesión la actual administración lo que menos se observaba era específicamente esa característica de alto resguardo, sino que se trataba de un centro donde estructuras operaban con total impunidad.
El propio SP es un “ecosistema criminal” y, por eso, surgen desde ahí las extorsiones y se organizan demás actos de delincuencia, señaló el ministro.
El nuevo concepto de máxima seguridad para El Infiernito, ubicada en el departamento de Escuintla, permitirá que no se cometan delitos desde adentro, adelantó.
El pasado 2 de junio el Ministerio de Gobernación trasladó 225 reclusos de El Infiernito a Fraijanes II y el preventivo para varones en la zona 18 de esta capital.
Tras una semana de realizado, el director de la entidad rectora de las prisiones en el país, Sergio Vela, precisó que encontraron 184 mil 500 quetzales (casi 24 mil dólares) y unos 70 teléfonos móviles en varias caletas (lugares escondidos), armas de fuego, tolvas y otros objetos.
Según trascendió, durante las primeras inspecciones los miembros del SP y de la Policía Nacional Civil hallaron varios animales exóticos y de granja, entre ellos mapaches, caimanes, zorros grises, un águila, gallinas y cabras.
Aparte, armas blancas, bebidas alcohólicas, routers, una silla para juegos de video, refrigeradores, máquinas de aire acondicionado y equipos de sonido.
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