En esa recuperación fue fundamental el desempeño del sector agropecuario, que creció 22,6 por ciento en comparación con 2023, cuando una fuerte sequía impactó en ese rubro fundamental para la economía uruguaya.
Destacan los resultados de la última zafra de la soya, uno de los principales productos de exportación.
En términos desestacionalizados, la actividad económica creció un dos por ciento respecto al primer trimestre, según el BCU.
La industria manufacturera registró en el segundo trimestre del año una contracción interanual de 0,5%, asociada al cierre por mantenimiento de la refinería de petróleo de La Teja, la única del país.
Pero el sector de la energía eléctrica, el gas y el agua tuvo un crecimiento del 30,4 por ciento por mayor generación de electricidad en base a fuentes renovables.
El comercio tuvo mejores resultados por el recorte de la brecha de precios que imperó durante 2023 con Argentina. También impactó que los turistas uruguayos gastaran menos en el exterior.
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