miércoles 16 de octubre de 2024
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Fuerzas de Ecuador buscan hectáreas de coca denunciadas por Noboa

Quito, 16 oct (Prensa Latina) El Bloque de Seguridad de Ecuador, integrado por las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, rastrea hoy zonas fronterizas para destruir las dos mil hectáreas de cultivos de coca existentes, según el presidente Daniel Noboa.

En rueda de prensa este miércoles, Miguel Córdoba, segundo jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, afirmó que la semana pasada destruyeron 2,5 hectáreas de plantaciones de coca y que en este momento están rastreando si hay más cultivos.

De acuerdo con Córdoba, pertenecen a grupos de delincuentes que operan en el país, aunque “por el momento” no hay detenidos.

Este lunes, el presidente Noboa aseguró en cadena nacional que se encuentran en suelo ecuatoriano dos mil hectáreas de plantaciones de coca.

El gobernante apuntó que esos cultivos iniciaron hace aproximadamente tres años y agregó que cada hectárea de coca equivale a 160 mil dólares en valor comercial, por lo que en total serían un golpe de 320 millones de dólares de pèrdidas para los narcotraficantes.

Medios locales revelaron que la información que dio el mandatario está amparada en un informe del Departamento de Estado de Estados Unidos, mismo documento que advierte la necesidad de corroborar los datos.

El sociólogo y catedrático universitario, Fernando Carrión, comentó que el anuncio de la supuesta localización de cultivos de coca es un efecto distractor frente a la crisis energética del país con apagones que se extiende por 10 horas diarias.

Según declaró Carrión en entrevista con la emisora Radio Pichincha, Ecuador no tiene grandes cultivos de coca, porque es un país denso y no hay territorio sin población, lo que dificulta la siembra.

Por otro lado, en la rueda de prensa sobre seguridad, la ministra del Interior Mónica Palencia aseveró que de enero al 13 de octubre de este año el número de homicidios registrados es de cinco mil 143, cifra que representa un 17,5 por ciento menos que en 2023.

Pese al discurso oficial, 2024 se encamina a cerrar como el segundo año más violento en la historia del país, donde persisten los crímenes aún cuando está vigente un estado de excepción en las provincias con mayores índices de inseguridad.

arc/avr

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