El mandatario angoleño discutió con los jefes de Estado la situación de seguridad en el este de la RDC y los últimos acontecimientos en el marco de los esfuerzos en curso para alcanzar la paz definitiva, informó la Presidencia.
La nota igualmente señaló que fueron abordados los próximos pasos encaminados a lograr una solución duradera a la crisis que afecta a la región oriental congoleña.
Lourenço, en calidad de mediador designado por la Unión Africana para el conflicto que enfrenta a Kinshasa y Kigali, hizo una propuesta de acuerdo de paz definitiva en el mes de agosto y, desde entonces, los cancilleres de ambos países se han reunido en Luanda para debatir diversos puntos.
La más reciente se realizó el 12 de octubre y en ese encuentro ambas partes acordaron las actividades y responsabilidades respectivas contenidas en el Plan Armonizado para la Neutralización de las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) y la Separación de Fuerzas/Levantamiento de las Medidas de Defensa de Ruanda.
La ministra de Relaciones Exteriores congoleña, Thérèse Kayikwamba Wagner, y su homólogo ruandés, Olivier J.P. Nduhungirehe, encomendaron a los expertos la elaboración de un programa detallado para la implementación del Plan.
Los cancilleres también acordaron continuar trabajando en los temas de seguridad pendientes contenidos en el Proyecto de Acuerdo de Paz, propuesto por el Facilitador.
Kinshasa acusa a Kigali de brindar apoyo a los rebeldes del Movimiento 23 de Marzo (M23), que mantiene ocupadas varias ciudades y comunas en el este de la RDC, así como de implicarse directamente en el conflicto.
En tanto Ruanda sostiene que el gobierno congoleño da respaldo a las FDLR, hostiles a su gobierno.
Ambas partes tienen desde el 30 de julio un acuerdo de alto al fuego, mientras que en agosto Angola formuló una propuesta de paz definitiva, actualmente en análisis.
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