De acuerdo con el canciller, la República Checa considera a Kazajistán un actor clave en Asia Central.
Lipavsky indicó que las relaciones económicas y comerciales son una parte importante de la relación entre Astaná y Praga, y aún existe un importante potencial que puede aprovecharse.
Entre las áreas de cooperación más prometedoras se encuentran la energía, la ingeniería, la agricultura y la aviación civil, declaró.
Lipavsky visitará Astaná este lunes y, según la Cancillería local, el objetivo del viaje es discutir las perspectivas de una cooperación mutuamente beneficiosa en el sector energético, la industria de defensa y el desarrollo del transporte aéreo.
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